El lema de nuestro circo: ‘Sí a la Diversidad, Sí a la Inclusión, Sí a la Autosuperación’ tiene mucho que ver con el origen de toda esta historia. Fue durante el día de ayer cuando descubrimos que los inicios de este circo no fueron muy felices. La mujer forzuda, la payasa ‘Piesgrandes’ y la pitonisa ‘Pocacola’ se conocieron de casualidad, cuando por diferentes motivos, se vieron excluidos de sus respectivos grupos de amigos y familias. Conocerse les dio la confianza y la fuerza necesaria para seguir adelante y poner en valor sus cualidades. Porque creer que tenemos algo que aportar a los demás es lo que nos infunde energía para sacar adelante nuestros proyectos vitales. Sin embargo, a pesar de la ilusión y los esfuerzos inciales, algo pasó que provocó que éste, nuestro circo, tuviese que cerrar. Ahora corre el peligro de desaparecer para siempre. ¡¡Necesitamos vuestra ayuda!!